¿Qué son las Instalaciones Fijas Contra Incendio?

Las instalaciones fijas contra incendio son todas aquellas cuya función es detectar un foco de incendio en sus primeras etapas de desarrollo o que cumplen una acción tendiente a prevenir, reducir, controlar o mitigar los efectos del fuego mediante una descarga manual o automática de un agente extintor (agua, polvo, gases limpios, espuma) a través de redes de cañerías o cableados, estratégicamente distribuidas y que permiten alertar ante una​ ​emergencia a los ocupantes del edificio y combatir ​el foco de incendio.

Cuando hablamos de Instalaciones fijas contra incendio, hablamos de 2 tipos de instalaciones:

• Detección
• Extinción manual o automática.

Los sistemas de detección, como su nombre lo indica, están destinados a la detección y «aviso» del inicio de un foco de incendio. Se componen de distintos tipos de sensores (gas, temperatura, humo) que analizan el aire, distinguen y dan aviso en forma individual o reportando a una central análoga o inteligente para alertar de una anomalía en el ambiente.

​En caso de detectarse una anomalía dichos sistemas emiten señales acústicas y luminosas que previenen ante un posible incendio y permiten una evacuación ordenada de los ocupantes del lugar y/o activan sistemas de extinción de incendio de forma automática de acuerdo a su configuración.

Los sistemas de ​extinción de ​incendios son los que forman la etapa de reacción del sistema, la cual puede ser por descarga de agentes extintores o por redes de agua, manuales o automáticas, diseñadas para el combate del fuego.

Estos sistemas se pueden clasificar de acuerdo al tipo de agente extintor que utilizan:

• Agua (​hidrantes y rociadores fijos)
• Espumas Químicas (diseñadas para la extinción de incendios)
• Agentes Limpios (gases que no dañan el medio ambiente)
• Acetato de Potasio (para uso gastronómico o cocinas)
• Polvos Químicos (para usos múltiples)